Paseo lleno de baches

Los amortiguadores gastados pueden hacer que los resortes de su automóvil reboten hacia arriba y hacia abajo más de lo que se considera normal. El resultado es una conducción más accidentada de lo habitual cuando se conduce sobre baches.

Ruidos inusuales

Los golpes sueltos o con casquillos de montaje desgastados pueden crear un ruido metálico o de golpes al pasar por encima de los baches.

Fugas de fluidos

Una de las razones por las que el líquido se agota desde el interior de los amortiguadores se debe a una fuga. Una fuga de fluido hidráulico puede ocurrirle a cualquier amortiguador y nunca debe ignorarse.

El fluido se puede ver fácilmente corriendo por los lados de la carcasa del amortiguador.

Desgaste irregular de los neumáticos

Quizás se esté preguntando qué tienen que ver los golpes malos con sus neumáticos. Su automóvil tiene amortiguadores para evitar que sus ruedas reboten debido a la reacción de los resortes a los golpes. Los amortiguadores defectuosos hacen que el neumático rebote con más fuerza en el suelo.

Como resultado, el neumático a menudo desarrolla puntos altos y bajos en la banda de rodadura, conocidos como ahuecamiento.

Capacidad de frenado y manejo reducida

Los golpes fuertes pueden hacer que su automóvil se incline más hacia un lado o hacia el otro al girar. Además, la parte delantera del vehículo puede hundirse en la parte delantera o trasera. Cualquiera de estos escenarios puede afectar negativamente las características de manejo y frenado de su automóvil.